Diosa nórdica Gefión
La Diosa nórdica Gefión está asociada con la fertilidad y la tierra. Engañó al rey Gylfi de Suecia para que le diera toda la tierra que pudiera arar en una noche. Convirtió a sus cuatro hijos en bueyes y arrancó un gran trozo de tierra, que lanzó al mar y formó la isla de Selandia (Zealand). El hueco dejó el lago Mälaren. Gefión encarna el poder femenino y la conexión con la tierra. En Dinamarca la recuerdan como figura importante.

Claves para entender a la Diosa nórdica Gefión
- Poder creador femenino: Gefión encarna la capacidad femenina de transformar, dar vida y moldear el mundo, tanto como madre como diosa de la tierra.
- Relación con la tierra y la fertilidad: Su mito la vincula directamente con el paisaje físico (Selandia), simbolizando la conexión sagrada entre dioses y territorio cultivable.
- Astucia y autonomía: A diferencia de muchas diosas dependientes de figuras masculinas, Gefión actúa sola, toma decisiones y conquista espacio con ingenio y poder.
¿Quién es Diosa nórdica Gefión?
Gefión es una diosa de la mitología nórdica asociada con la fertilidad, la tierra y la agricultura. Su mito más conocido aparece en la Edda prosaica de Snorri Sturluson, donde se relata cómo engañó al rey sueco Gylfi para obtener tanta tierra como pudiera arar en una noche. Transformó a sus cuatro hijos en bueyes y con ellos labró un enorme pedazo de tierra que arrojó al mar, formando la isla de Selandia (actual Zealand, en Dinamarca). El hueco dejado en Suecia sería el lago Mälaren. Gefión representa el poder femenino creador y transformador. A menudo se la vincula con la prosperidad de la tierra cultivada y es una figura central en algunas tradiciones danesas. Su estatua más famosa se encuentra en Copenhague, frente a la fortaleza Kastellet.
¿Qué significa Gefión?
El nombre Gefión proviene del nórdico antiguo Gefjon o Gefjun, y está relacionado con el verbo “gefa”, que significa “dar”. Por eso, su nombre puede interpretarse como “la que da” o “la dadora”. Este significado refuerza su asociación con la fertilidad, la tierra fértil y la abundancia, ya que es una diosa que otorga vida, recursos y territorio. También subraya su papel como figura generosa y poderosa dentro del mundo mitológico nórdico.
Diosa nórdica Gefión en la mitología vikinga
Gefión pertenece al panteón de las diosas Aesir, aunque su figura resulta ambigua. Algunos estudiosos proponen que tiene origen Vanir, debido a su relación con la fertilidad y la tierra, características más propias de ese grupo. Sin embargo, los textos antiguos la incluyen entre los Aesir, el grupo de dioses guerreros y celestiales.
Su genealogía no está del todo clara. Las fuentes principales, como la Edda prosaica, no mencionan con precisión a sus padres ni su linaje directo. Aun así, algunas teorías la vinculan con Frigg, la esposa de Odín, por su autoridad y conexión con el destino. Ambas ejercen roles importantes dentro del orden divino, aunque nunca aparecen juntas en los mitos.
También existe debate sobre una posible relación con Freyja, diosa Vanir asociada con el amor y la fertilidad. Gefión, sin embargo, muestra una personalidad más independiente y activa. Su mito la muestra como una figura decidida, capaz de transformar a sus hijos en bueyes y conquistar territorio por su cuenta.
En el ámbito comparativo, algunos investigadores la asocian con diosas germánicas e indoeuropeas relacionadas con la tierra y el dar vida. Tiene similitudes con la diosa Nerthus, una antigua divinidad germánica de la fertilidad mencionada por Tácito. También guarda paralelismos con Deméter, la diosa griega de la agricultura, y con la Cailleach, figura celta ligada a la formación del paisaje.
Gefión representa la unión entre lo sagrado femenino, la tierra fértil y el poder de crear o transformar. Aunque no destaca como una diosa principal, su mito la presenta como figura fuerte y significativa dentro del mundo nórdico.
Más sobre diosas vikingas

Mito de la creación de Selandia
El mito más famoso de Gefión explica la creación de Selandia (Zealand), la isla más grande de Dinamarca. Según la Edda prosaica, Gefión viajó desde Asgard hasta Suecia, donde se encontró con el rey Gylfi. Él, impresionado por su belleza y astucia, le prometió tanta tierra como pudiera arar en una sola noche.
Gefión transformó a sus cuatro hijos en bueyes gigantes y, con su fuerza combinada, aró un enorme trozo de tierra. Trabajaron durante toda la noche, arrancando una sección completa del territorio sueco. Luego, Gefión llevó esa tierra hasta el mar y la colocó entre la península de Jutlandia y Suecia, formando así la isla de Selandia.
El hueco que quedó en Suecia, según el mito, se convirtió en el lago Mälaren. Algunas versiones antiguas también mencionan el lago Vänern, debido a su forma similar a la de Selandia.
Este mito muestra a Gefión como una diosa poderosa, decidida y con control sobre fuerzas naturales y mágicas. No solo actúa como madre, al transformar a sus hijos, sino también como conquistadora y creadora. El mito conecta el paisaje danés con un acto divino, otorgando valor sagrado al territorio.
Hoy en día, una gran fuente-escultura de Gefión en Copenhague representa esta historia. En ella, se ve a la diosa guiando a los cuatro bueyes mientras aran la tierra. La obra recuerda la fuerza creativa de Gefión y su vínculo con la identidad nacional danesa.
